Minutos antes de que se abrieran las puertas, la cola para entrar en la Basílica de Jesús de Medinaceli daba la vuelta a la esquina. Llega
Minutos antes de que se abrieran las puertas, la cola para entrar en la Basílica de Jesús de Medinaceli daba la vuelta a la esquina. Llega